- Acceso a información poco fiable y falsa. Existe mucha información errónea y poco actualizada en Internet, ya que cualquiera puede poner información en la red. Su utilización puede dar lugar a múltiples problemas: desde realizar mal un trabajo académico hasta arruinar una actuación empresarial.
- Dispersión, pérdida de tiempo. A veces se pierde mucho tiempo para localizar la información que se necesita. Es fácil perderse navegando por el inmenso mar informativo de Internet lleno de atractivos "cantos de sirena". Al final el trabajo principal puede quedar sin hacer.
- Acceso de los niños a información inapropiada y nociva. Existen webs que pese a contener información científica, pueden resultar inapropiadas y hasta nocivas (pueden afectar a su desarrollo cognitivo y afectivo) para niños y menores por el modo en el que se abordan los temas o la crudeza de las imágenes (sexo, violencia, drogas, determinados relatos históricos y obras literarias...). La multimedialidad de Internet puede hacer estos contenidos aún más explícitos e impactantes.
- Acceso a información peligrosa, inmoral, ilícita. Existe información poco recomendable (pornografía infantil, violencia, todo tipo de sectas...) y hasta con contenidos considerados delictivos que incitan a la violencia, el racismo, la xenofobia, el terrorismo, la pedofilia, el consumo de drogas, participar en ritos satánicos y en sectas ilegales, realizar actos delictivos... La globalidad de Internet y las diferentes culturas y legislaciones de los países hacen posible la existencia (por lo menos temporal, ya que grupos especiales de la policía dedicados a delitos informáticos realiza actuaciones a nivel internacional) de estas páginas web en el ciberespacio
Los primeros riesgos se pueden paliar aprendiendo buenas técnicas para buscar la información y valorarla con juicio crítico, así como adquiriendo hábitos de trabajo en Internet que limiten la tendencia a la dispersión al buscar contenidos. En cuanto a los segundos, que afectan sobre todo a los más jóvenes, exigen una adecuada respuesta por parte de padres y educadores mediante la instalación de programas de protección en los ordenadores que limiten el acceso a determinadas páginas web y alertando a los niños y jóvenes sobre estos riesgos, explicándoles de manera adecuada a su edad las razones. Entendemos que los medios de comunicación social también deberían alertar a los ciudadanos en general sobre las páginas web con contenidos ilegales y sobre la conveniencia de denunciarlas.
- Riesgos relacionados con la comunicación interpersonal. Las personas muchas veces necesitamos comunicarnos con personas lejanas o establecer nuevos contactos sociales. Internet nos ofrece infinidad de canales y oportunidades (e-mail, chats, weblogs...), aunque conllevan algunos riesgos.
BUEN USO DEL CORREO ELECTRONICO
Mucho se ha hablado de las mejores prácticas que debemos tener para resguardar nuestra organización con respecto al uso de los recursos informáticos, tales como el correo electrónico. Hay discusiones sobre confidencialidad, propiedad de la información transmitida en los mensajes, códigos de ética y privacidad del correo.
Hemos decidido hacer una pausa en las discusiones, tomarnos unos minutos para analizar, y volver a las fuentes: ¿Cuál es la mejor forma de utilizar el correo electrónico provisto por la empresa (y el personal también, porqué no!)
- Utilizar el correo electrónico como una herramienta de trabajo, y no como nuestra casilla personal de mensajes a amigos y familiares.
- No enviar archivos de gran tamaño a compañeros de oficina. ¡Para algo se hicieron los file servers y la red! Consulten con la Gerencia de Seguridad para definir la mejor alternativa.
- No enviar grandes cadenas de chistes en forma interna... y mucho menos si nos "equivocamos" y ponemos a nuestro jefe en ellas...
- Si se recibe un correo de origen desconocido, consulten inmediatamente con la Gerencia de Seguridad, o levanten un incidente a través de la mesa de ayuda. Bajo ningún aspecto se debe abrir o ejecutar archivos adjuntos a correos dudosos, ya que podrían contener códigos maliciosos (virus, troyanos, keyloogers, gusanos, etc).
- Si estamos trabajando con información del tipo confidencial, crítica o sensible, deberemos prever los mecanismos de seguridad necesarios previos al envío. Para ello, consultar siempre con la Gerencia de Seguridad o las normativas internas. Recuerden que toda información tiene un "Dueño" y no nos corresponde a nosotros decidir sobre el destino de la misma.
- Los correos no deben contener información que pudiera ser interpretados como ámbito de ataque, discriminación o ilegalidad. Todo lo que escribamos bajo el dominio de la organización, es en representación de la misma, y nuestras palabras podrían ser utilizadas de formas no previstas. Por eso, antes de cliquear en "SEND". Releer el correo y corregir de ser necesario, tratando de "suavizar" cualquier frase.
- Cuando se contesta un correo, evitar poner "Contestar a todos" a no ser que estemos absolutamente seguros que el mensaje puede ser recibido por "todos" los intervinientes. No sería muy práctico "Responder a todos" que "Pep_NN" es un incompetente, y copiar en el mensaje a "Pep_NN"...
- El acceso a las cuentas personales debe ser mínimo (o ninguno) durante nuestra jornada laboral. Consultar con la Gerencia de Recursos Humanos y la de Seguridad cuales son las restricciones de la empresa respecto de este tipo de accesos.